Y como pasa el tiempo. Hoy se cumplen veinticinco años del lanzamiento del Appetite de los Guns, un disco redondo en todos los sentidos más allá de su obvia forma. Y es que tiene todo lo que se debe tener para pasar a la historia del rock como uno de los mejores discos de todos los tiempos: buenas canciones por supuesto y polémicas sexuales en los "castos" Estados Unidos.
El disco tardó en levantar en vuelo por el veto de la MTV a sus videos debido a la polémica portada del disco, donde un dibujo de un robot violador fue censurada y por tanto el grupo y sus temas. Tras cambiar dicha imagen a la parte interior del disco, las cosas empezaron a tomar el curso que hoy ya todos conocemos.
Y en cuanto a las canciones, aparte de incluir el archiconocido y tarareado Sweet Child o' Mine, aparecen otras de grandísima calidad como Welcome to the Jungle, Nighttrain, Paradise City o My Michelle por ejemplo. De hecho, casi todas las canciones podrían haber salido como singles porque son un cañón.
Hoy el tiempo ha pasado y los Guns andan cada uno por su lado, han sacado nuevos discos, se han reunido y separado unas cuantas veces... En fin, los gajes típicos de la historia del rock. Por suerte, las canciones permanecen inalterables y nuestro recuerdo de ellas es personal e intransferible, así que demos la bienvenida a la jungla y dejemos un poco al Sweet Child que me parece que ya ha salido alguna vez por estos lares.
1 comentario:
Me compré el disco por la portada sin conocer al grupo; el impacto fue brutal. Recuperé la conciencia en aquellos años por la buena música. Un abrazo.
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