La publicación del nuevo libro de Joe Hill "Fantasmas" (que aún no he leído), me ha traído a la memoria su anterior trabajo "El Traje del Muerto" que leí hace un tiempo. Una historia de fantasmas entremezclada con las nuevas tecnologias, en las que un viejo rockero aburrido de la fama y el dinero, se entretiene comprando un fantasma por internet. Pero, ay amigo, que tenía trampa en forma de regalo envenenado de una antigua amante.
Escrita a mi entender con clara tendencia a convertirse en película (creo que ya están en ello), ha dejado en mi memoria unos cuantos detalles interesantes. Uno ha sido las continuas referencias al mundo del rock and roll: bandas, modelos de guitarras, sus perros se llaman Angus y Bon... y otro la propia historia personal del protagonista, al que su padre rompe los dedos de la mano izquierda para que no pueda seguir tocando la guitarra, y el, ni corto ni perezoso y con un ahinco de envidiar, se echa la guitarra al hombro contrario y vuelve a aprender a tocar con la mano derecha. Esto me marcó porque a mi me pasó una cosa parecida aunque no tan dramática. Las pasadas navidades me corté accidentalmente con un cristal en la mano izquierda y estuve a punto de seccionarme un tendón. Por suerte, la cosa no fue a más y tengo la mano en perfectas condiciones, aparte de otra fea cicatriz. A lo que iba: por aquel entonces llevaba ya varios años sin tocar la guitarra y el corte fue como una señal que me dijo: "Tío, aprovecha que estás entero y puedes tocar porque a lo mejor cualquier día quieres y ya no puedes". Y aquí estoy, que he retomado el tema guitarrero y estoy tan contento y entretenido.
Para finalizar (perdonad que me haya enrollado con mis memorias) un par de curiosidades más. El título original del libro es "Heart-shaped Box" que se refiere a la forma del paquete en el que viene el traje del muerto (caja de bombones con forma de corazón), y Joe Hill es hijo del gran Stephen King, por si os sirve de algo.
Escrita a mi entender con clara tendencia a convertirse en película (creo que ya están en ello), ha dejado en mi memoria unos cuantos detalles interesantes. Uno ha sido las continuas referencias al mundo del rock and roll: bandas, modelos de guitarras, sus perros se llaman Angus y Bon... y otro la propia historia personal del protagonista, al que su padre rompe los dedos de la mano izquierda para que no pueda seguir tocando la guitarra, y el, ni corto ni perezoso y con un ahinco de envidiar, se echa la guitarra al hombro contrario y vuelve a aprender a tocar con la mano derecha. Esto me marcó porque a mi me pasó una cosa parecida aunque no tan dramática. Las pasadas navidades me corté accidentalmente con un cristal en la mano izquierda y estuve a punto de seccionarme un tendón. Por suerte, la cosa no fue a más y tengo la mano en perfectas condiciones, aparte de otra fea cicatriz. A lo que iba: por aquel entonces llevaba ya varios años sin tocar la guitarra y el corte fue como una señal que me dijo: "Tío, aprovecha que estás entero y puedes tocar porque a lo mejor cualquier día quieres y ya no puedes". Y aquí estoy, que he retomado el tema guitarrero y estoy tan contento y entretenido.
Para finalizar (perdonad que me haya enrollado con mis memorias) un par de curiosidades más. El título original del libro es "Heart-shaped Box" que se refiere a la forma del paquete en el que viene el traje del muerto (caja de bombones con forma de corazón), y Joe Hill es hijo del gran Stephen King, por si os sirve de algo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario