¡Atención! Lo que viene a continuación es sólo apto para aquellos que vieron la serie Breaking Bad. Para los demás, vean la serie o dejen de leer.
El final de Breaking Bad dejó el camino abierto para uno de los protagonistas de la serie, Jesse Pinkman, que terminó huyendo en un coche a grito pelado sin desvelarnos cuál era su destino. Y eso es lo cuenta este spinoff.
Para mí, esta historia marca a la perfección la evolución de un personaje, que comenzó en la serie siendo un drogadicto ruinoso hasta convertirse en un superviviente cabal y sensato. Eso sí, a cambio de un duro precio que el dinero no fue capaz de pagar.
Llama la atención como a pesar de actuar de forma ilegal en un mundillo lleno de peligros, él mantiene sus principios con el único fin de escapar y conseguir una nueva vida totalmente diferente. Ha llegado el momento, tras muchas penurias, de tener las ideas claras y saber cuál es su objetivo.
Reconozco que en la serie no me gustaba mucho su papel, demasiado idiota y colgado de las drogas que le hacían cometer error tras error. Pero a fuerza de golpes, sufrimiento y pérdidas se fue transformando en alguien frío y calculador. Y ahora, tras su transformación personal, empatizo al cien por cien con él y me alegro que haya conseguido lo que deseaba.
Saludos hacia el norte de todo corazón, Jesse.
Saludos hacia el norte de todo corazón, Jesse.
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