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lunes, 20 de julio de 2009

40 Aniversario de la llegada del hombre a la Luna.

A pesar del tiempo que ha pasado, todavía existen numerosos rumores y teorías que ponen en duda tanto que este acontecimiento ocurriera de verdad, como que ocurriera tal y como nos lo contaron.
En primer lugar se duda de la verosimilitud de este hecho por las fotografías que se hicieron sobre la superficie lunar. Parece que no se corresponden la iluminación ni el ondear de la bandera americana con la realidad, más bien sugieren que se realizaron en un estudio fotográfico. Hay que reconocer que en aquella época la extinta URSS iba muy en cabeza en la carrera espacial y los Estados Unidos necesitaban un golpe de efecto frente a la opinión mundial.
En segundo lugar, en el caso de ser cierto, se constata por
múltiples fuentes que las comunicaciones entre la nave y la NASA eran filtradas antes de emitirlas publicamente. Había un retardo que permitía a la NASA omitir aquellas afirmaciones que no interesaban que trascendieran. Esto ha dado pábulo a hipótesis sobre avistamientos OVNI y demás.
Las conjeturas más increibles las leí en Ovnis, SOS a la humanidad de J. J. Benítez, libro que ya ha aparecido en el blog con anterioridad y que seguramente lo hará en más ocasiones. Allí se habla de ruinas de antiguas civilizaciones en la luna, así como de una llegada previa de los rusos al satélite, que resultó ser un fiasco con varios astronautas soviéticos muertos a manos de unos hostiles extraterrestes.
Lo que si es re
al y no se puede negar, es el cambio sufrido en la vida de los astronautas que pisaron la Luna. Todos sufrieron cambios en su forma de vida, tanto en su carácter como en su interés por lo místico. Aparte del silencio impuesto por las autoridades norteamericanas bajo amenazas tanto propias como a sus familias, inquietante es el hecho de que muchos de ellos visitaran un lugar concreto, la Cueva de los Tayos en Ecuador. ¿Qué buscaban? ¿Realmente vieron algo extraño en sus viajes? Preguntad cuanto querais que la respuesta todavía habrá que buscarla.

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