Incluso hoy día que vivimos la era de la globalización y hay de todo en todas partes, es difícil encontrar por estos lares un local donde sirvan Voll-Damm de grifo.
Por esta razón, tengo un gran recuerdo de juventud al rememorar nuestros viajes a tierras más próximas al origen de la cerveza, donde si era posible beberla en forma de caña. Una de las primeras cosas que solíamos hacer mi padre y yo al llegar, era acercárnos al Bar Marfil y tomarmos una buena copa de Voll-Damm. Como íbamos normalmente en vacaciones de verano, el calor acompañaba y se producía una combinación simplemente deliciosa entre el frescor de la cerveza y el calor del ambiente.
Por aquí solo es posible encontrarla en botellín, y es una elección acercada muchas veces, solo hay que tomarla en su justa medida porque de lo contrario tu cabeza puede sufrir mucho al día siguiente.
Por aquí solo es posible encontrarla en botellín, y es una elección acercada muchas veces, solo hay que tomarla en su justa medida porque de lo contrario tu cabeza puede sufrir mucho al día siguiente.
Donde esté una Heineken,una Carlsberg, una Skol... que se quite lo demás.
ResponderEliminarSi es que no me sabe beber Mr Gibson.
No piques, que sabes que las botellas verdes me echan para atrás. Y a tí también.
ResponderEliminarHay una Alahambra en botella verde que está....humm....usted se lo pierde
ResponderEliminarEsa tiene un verde tan oscuro que parece otro color.
ResponderEliminarNo comparen la alhambra con las basuras de marcas arriba comentadas, hombres de dios. De hecho, creo que pertenece a la ilustre familia Mahou. Salud!
ResponderEliminarPeroooo...
ResponderEliminarLa VolDame es Polaca???
Pues se acabó!!!
Viva la Meau!!!