Bandas que me crucé en el largo camino del Rock and Roll: Ramones.

Fue a través de un vecino mío, cuyo hermano tenía una cinta roñosa de unos tales Ramones. Yo pensaba que eran españoles con ese nombre, pero no, resultó que eran americanos y cantaban en inglés, y la cinta era de su primer disco del 76 con los clásicos imprescindibles: Blitzkrieg Bop, Beat on the Brat, Judy is a Punk, Now I wanna sniff some glue... Que canciones tan cortas y rápidas, sin punteos, a base de guitarrazos y la peculiar voz de Johnny. Ya no nos separaríamos en el camino del rock.
Tuve la inmensa suerte de poder verlos en directo. Creo que fue en el 92 en un pueblo de Burgos. Dios mio, casi me da un infarto, creí que no salía vivo de allí poseído por aquel ritmo frenético que no paraba. Tocaron todas las canciones del tirón, unidas por un two, three, four que no daba pie al descanso. No pude acercarme a las primeras filas porque era repelido por una turba de melenudos imparables. Acabé con la camisa rota y con la sensación de haber vivido uno de los mejores días de mi vida.

Después vinieron las tristes noticias de las muertes de los componentes, uno a uno fueron todos cayendo hasta que sólo quedó Marky. Y de nuevo lo vi, esta vez haciendo homenaje a sus compañeros caídos y el manteniendo el tipo aunque fuera con peluca.
A mi entender, una banda básica que no debería faltar en la discografía de ningún buen rockero que se precie de serlo.

Hey, Ho, let's go!