Un dia triste.

Se intentó pero no se pudo. Tras varias horas de espera bajo un frio helador, nos quedamos sin entradas para AC/DC. Nuestras plegarias al espíritu de Bon Scott no tuvieron respuesta y no se obró el milagro. Los modernísimos sistemas de venta fallaron, quiero creer que por motivos técnicos y no provocados y nos dejaron con la miel en los labios.
Se rumorea que será la última gira de la banda y me da pena pensar que lo más seguro es que me quede con las ganas de ver, por lo menos una vez en la vida, a los AC/DC en directo. Me quedarán los dvds de sus conciertos en el pasado y lo que me cuente algún amigo afortunado que si podrá ir a verlos. Solo me queda decir enhorabuena a los poseedores de esas entradas mágicas y pedirles que el dia del concierto disfruten al máximo y se acuerden de los que no pudimos estar allí.
Para seguir en plan masoquista, en el video podeis ver lo que me voy a perder.¡Mecachis!