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lunes, 28 de mayo de 2012

Cerveza Artesanal de Trigo Santa Margarida.

De nuevo procedente de tierras catalanas nos llega otra variedad artesanal cervecera que catar. Una cerveza totalmente natural sin pasteurizar ni filtrar que conserva todas sus cualidades de origen.
Tanto al abrirla como al servirla destaca la enorme cantidad de gas que ha ido acumulando en la botella. La espuma crece sin parar y la efervescencia se conserva durante toda la cata en el líquido. Sin embargo, la espuma desaparece tan rápido como subió y al beberla no se aprecia todo el gas que parece tener al observarla.
De color amarillo claro y muy turbia, rozando la opacidad, se intuyen en el fondo de la copa los posos tradicionales de estas cervezas. El aroma nos recuerda sin duda al vino o al cava y al degustarla se nos hace más patente esa extraña cercanía que tiene con el cava, aparte de una tendencia muy fuerte a los sabores afrutados. Cerveza ligera en cuanto a graduación alcohólica (4,2%) pero muy espesa en cuanto a composición y paso por el paladar.
 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El aspecto de esta cerveza es mate y opaco, de color pajizo. Muy desagradable a la vista.
Al abrirla genera mucho gas, que al echarla al vaso, con cuidado para que no se desborde, se convierte en una espuma chispeante como la de un refresco de cola.
Mucho olor a cereal.
En la boca, primero una sensación burbujeante que lo llena todo. Controlado ese efecto, una sucesión de sabores mal combinados y peor integrados entre sí. Entre ellos, uno muy intenso a cereales y levadura, como de masa de pan medio cruda; luego, uno como a ahumado, extraño y fuerte. Al final, un regusto amargo muy desagradable, como de lúpulo de herbolario echado a perder.
Tengo que decir que tras varios sorbos de un líquido tan horrible, pensé si estaría podrido, por aquello de que es una cerveza sin pasteurizar. Tiré más de medio vaso al fregadero.
Después de dos horas, seguía eructando los gases de ese brebaje y me duraba la sensación de asco.

Hay que tener muy poca vergüenza, ninguna, para comercializar esto.

Mr. Gibson dijo...

Mi mujer está completamente de acuerdo contigo amigo anónimo.
Yo pensaba que el gusto tan cercano al cava o a un vino era producto de tanta naturalidad en su elaboración, pero a lo mejor es porque no se conserva bien en botella.

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